Sigo con el tema. En ocasiones la diferencia entre lo que miramos y nuestra comprensión de lo que está sucediendo es francamente asombrosa. La Cinta de Moebius, por caso, hace difícil dar crédito a lo que está sucediendo frente a nuestros propios ojos.
August Ferdinand Möbius nació en Schulpforta, Alemania, en 1790. Discípulo de Gauss, ejerció como astrónomo y matemático en la Universidad de Leipzig. Fue investigando sobre Topología que descubrío en 1858 su famosa cinta, mientras se dedicaba al estudio de las superficies de una sola cara. Murió en Leipzig en 1868.
La Cinta de Moebius es una superficie sencilla. Si tomamos una cinta y unimos sus vértices A con D y C con B dándole media vuelta -como muestra el video al pié-, obtenemos una superficie de una sola cara y un solo borde, que tiene la propiedad matemática de ser un objeto no orientable -aunque tus ojos digan lo contrario.
Por ejemplo, si trazamos una línea a partir de un punto de su superficie, esa línea recorrerá toda la cinta sin haber pasado el borde, porque tiene una sola cara.
Lo notable del caso es que la cinta tiene aplicaciones prácticas. Por ejemplo, para obtener una cinta transportadora que se desgaste uniformemente por ambas caras -aunque ya vimos que se trata de una sola-, aumentando su durabilidad. Ese es sólo un uso, pero hay otros.
Los dejo con un video que muestra algunas otras propiedades esta cinta. En ocasiones las palabras no alcanzan pero, en este caso, la mirada convencional tampoco.