Leo en ElPais.com vía XarxaTIC, que Alemania dará clases de privacidad en la red a sus escolares.
Muy interesante la propuesta, desde el momento en que se trata de una apuesta fuerte por la educación, en franca oposición a las políticas de muchas escuelas que optan por la prohibición o el temor como única estrategia, frente al avance irrefrenable de las NTI -en especial, las redes sociales en la web- entre los niños y adolescentes.
Copio y pego los pasajes que considero más relevantes del artículo original:
Muchos centros educativos están optando por cortar el acceso a redes sociales. En unos casos por miedo a la dispersión y baja productividad de los alumnos. En otros por cuestiones de privacidad.
En lugar de meter miedo, educar. En lugar de prohibir (y para convertir las redes sociales en objeto de deseo), enseñar. Según el diario Spiegel de Alemania las autoridades educativas del país están preparando una asignatura sobre privacidad en la que se enseñe a los jóvenes cómo manejar su identidad digital en sitios como Twitter y Facebook.
Más de dos millones de adolescentes alemanes tienen perfiles en estos servicios y comparten información sensible, fotografías y opiniones sin manejar filtro alguno. Uno de los aspectos destacados para tomar esta decisión indican los creadores de la asignatura es el posible futuro laboral de los estudiantes. Muchas de las fotografías colgadas de la época del instituto podrían aparecer al hacer una búsqueda una vez terminada la investigación.
Se cita en el artículo en cuestión, el argumento en este sentido de la Ministra de Medios la región del norte del Rin y Wetsfalia, Angelica Schwall-Düren,
Nuestra meta es mostrar que internet no sólo ofrece oportunidades sino que también tiene riesgos que los estudiantes deben asumir para comunicarse con seguridad e independencia en estos nuevos medios. Los jóvenes no son conscientes de los detalles que comparten de sí mismos en las redes.
Luego de leer la nota, conversé unos momentos con la directora de una de las escuelas en las que trabajo, porque la sé preocupada por estas cuestiones. Estuvimos de acuerdo en que, si no incorporar el tema como materia, sí abordarlo desde espacios como «Formación ética y ciudadana» -una materia muy adecuada para el tratamiento de estas problemáticas. El punto central, haciendo una primera lectura de este tipo de propuestas, sería el tratamiento de la cuestión de lo público y lo privado, que parece ser la línea fronteriza que se desdibuja cuando el sujeto en cuestión se enfrenta a las ofertas de la red.
Buen tema para el debate, con una actitud de hacer y no temer. Es decir, educar. Nada menos.