Argentina ganará el mundial, según un análisis basado en números realizado por Federico Ast, licenciado en Economía y en Filosofía, editor de MATERIABIZ, «argentino y futbolero».
Cabría aclarar, para quienes no conocen la publicación, que «MATERIABIZ es una comunidad de personas vinculadas al mundo de los negocios. (…) Su contenido es la producción de investigadores y profesores de prestigiosas escuelas de negocios y (…) el aporte original y espontáneo de todos los integrantes de la comunidad.» De allí que sea interesante al menos asomarse a este análisis no exento de humor.
Ast afirma que «los simpatizantes de fútbol cometen serios errores lógicos cuando evalúan las probabilidades de éxito de su propio seleccionado en un mundial», justificando esos errores en que «las predicciones se encuentran fuertemente afectadas por un factor clave: la nacionalidad del analista». Entonces se embarca en un análisis muy simpático, según su análisis basado en datos. Primero, algunas consideraciones:
En Brasil, España, Francia, Alemania, Holanda, Inglaterra, e Italia, se registra una sistemática sobreestimación de las posibilidades del propio combinado nacional. En la Argentina, curiosamente, el sesgo se manifiesta en sentido opuesto: los analistas subestiman las chances del equipo. Este fenómeno es, en cierta medida, una manifestación futbolística de los sesgos que afectan a los ejecutivos a la hora de analizar información para la toma de decisiones. Con mucha frecuencia, buscamos y presentamos sólo los datos que confirman nuestras intuiciones mientras desestimamos aquellos que contradicen nuestra teoría.
Por eso el autor arriesga su resultado:
Con los datos adecuados, usando sólo la razón y el sentido común, demostraré que la Argentina será el próximo campeón del mundo (…) el seleccionado de Diego Maradona es el único que soporta el frío test empírico.
Este es parte de su análisis, candidato por candidato:
«Inglaterra y Brasil, los favoritos de los bancos de inversión»
En las últimas semanas, los bancos JP Morgan y Goldman Sachs publicaron informes con predicciones sobre el desempeño de los distintos países en Sudáfrica 2010. El primero estima el que campeón será Inglaterra. El segundo, que la copa viajará a Brasil. ¿Cómo llegaron a estas conclusiones? Con datos extraídos de diversos corredores de apuestas a los que aplicaron los mismos modelos cuantitativos que utilizan en sus operaciones de trading. Aunque, ¿podemos confiar en los mismos modelos matemáticos que afirmaban que las inversiones hipotecarias eran seguras? (…) Como muestra, basta lo siguiente. El modelo de Goldman Sachs sostiene que los Estados Unidos tienen un 2,81% de probabilidades de quedarse con la copa, por encima del Portugal de Cristiano Ronaldo (¡y casi el triple que Paraguay, que hizo una impecable eliminatoria!). ¿Es muy descabellado pensar que se trata de una «devolución de gentilezas» al gobierno norteamericano por el salvataje que el banco recibió en octubre de 2008?
«España, un equipo no mundialista»
(…) Si analizamos los datos históricos, sencillamente vemos que España nunca llegó a disputar siquiera una semifinal de una Copa del Mundo (ni siquiera en 1982, cuando organizó el torneo). La camiseta que vestirán Puyol, Xavi y el Niño Torres no rinde en los mundiales.
«Holanda, tierra de crack pero sin mundiales»
Lo cierto es que Holanda casi no se ha beneficiado de su talento futbolístico. Si bien estos jugadores han descollado en los mejores clubes del mundo, su desempeño en los mundiales ha sido muy pobre. (…) Lo que no pudieron Cruyff, Gullit, Van Basten, Rikjaard, Bergkamp, Davids y tantas otras estrellas, ¿podrán conseguirlo en Sudáfrica Heitinga, van der Vaart, Babel y Huntelaar? (con todo el respeto que merecen estos buenos jugadores).
«Italia no puede ganar dos mundiales seguidos»
En la posguerra, ningún equipo ganó dos mundiales seguidos con el mismo director técnico. (…) Como se sabe, el DT de Italia es Marcello Lippi, el mismo que ganó la copa en 2006. Inevitablemente, será incapaz de repetir el triunfo en 2010.
«Francia, sin Zidane es imposible»
Los años dorados del fútbol francés tienen una explicación con nombre y apellido: Zinedine Zidane. (…) Zizou jugó su último partido para les «bleus» en la final de 2006 contra Italia. Su carrera terminó con aquel recordado cabezazo al zaguero Marco Materazzi. Y, con esa expulsión, acabaron también los años dorados del fútbol francés.
«Alemania y la imposibilidad geográfica»
Alemania nunca llegó a la final de un mundial disputado en el hemisferio sur. Más aún, los tres mundiales que ganó fueron en Suiza (1954), Alemania (1974) e Italia (1990). Es decir, siempre jugando de local o dentro de un área de influencia cercana a sus fronteras.
«Argentina campeón, por necesidad estadística»
El paralelismo de la clasificación agónica: Este es un argumento conocido, pero no por ello menos poderoso. En 1985, Argentina se clasificó al Mundial con un agónico gol de Ricardo Gareca contra Perú en el estadio de River Plate. Y, como se sabe, la albiceleste se quedó con la Copa en México ’86. En 2009, 24 años después, el gol de la clasificación lo marcó Martín Palermo, en el mismo arco del mismo estadio, contra el mismo rival y también empujando un centro rasante sobre la línea. El paralelismo es evidente.
El paralelismo del liderazgo: En México ’86 e Italia ’90 los puestos directivos clave de la selección argentina eran ocupados por Julio Humberto Grondona (presidente de la AFA), Carlos Salvador Bilardo (director técnico) y Diego Maradona (que manejaba el equipo dentro del campo). Tras 20 años de sequía, en 2010, Argentina tiene a las mismas personas en posiciones de liderazgo. Grondona sigue como presidente de la AFA, Bilardo regresó como manager general de la selección y Maradona es el DT.
El paralelismo del clima: Un minucioso análisis de los datos nos revela que todos los mundiales disputados en el hemisferio sur fueron ganados por países de dicho hemisferio: Uruguay 1930 (campeón Uruguay), Brasil 1950 (campeón Uruguay), Chile 1962 (campeón Brasil), Argentina 1978 (campeón Argentina).
Las conclusiones no son menos polémicas:
Como alguna vez dijo el célebre estadístico Damodar Gujarati: «Si se tortura lo suficiente a los datos, éstos acaban por confesar». En este artículo, hemos desarrollado un análisis absolutamente objetivo e imparcial, con datos certeros e indiscutibles que cualquiera puede comprobar, sin fanatismos, sin prejuicios, sin colores ni intereses ocultos. Gracias a este análisis, hemos identificado correctamente las causas y efectos que explican el desempeño de un equipo en un mundial. Así, podemos afirmar, lógicamente, que el seleccionado argentino se alzará con la Copa del Mundo 2010. Es una necesidad histórica.
No digan que no es, por lo menos, gracioso. Lo termino acá porque tengo cosas que hacer… ¡Vamo vamo, Argentinaaaaa!
Saludos a los amigos españoles quienes, en contra del pronóstico de este análisis, han visto a su escuadra nacional llevarse la copa, merecidamente y con todos los honores.
Nosotros, mientras tanto, seguimos penando mundiales y añorando nuestras viejas glorias…
E.