Quien dice esto es Manuel Castells, sociólogo español, en una entrevista de ElPaís.com a la que llegué gracias a que mi lector de feeds (FeedReader, por si interesa…) me tiene al día con lo que escribe Diego Levis.
Con un pensamiento claro y directo que llama a las cosas por su nombre, Castells dice cosas como estas:
Yo he estado en no sé cuántas comisiones asesoras de gobiernos e instituciones internacionales en los últimos 15 años, y la primera pregunta que los gobiernos hacen siempre es: ¿cómo podemos controlar Internet? La respuesta es siempre la misma: no se puede. Puede haber vigilancia, pero no control.
El más importante factor de exclusión seguirá siendo el acceso al trabajo y a la carrera profesional, y antes el nivel educativo, porque, sin educación, la tecnología no sirve para nada.
En realidad, Internet amplifica la más vieja brecha social de la historia, que es el nivel de educación. Que un 55% de los adultos no haya completado en España la educación secundaria, ésa es la verdadera brecha digital.
Muchos municipios han puesto puntos Wi-Fi de acceso, pero si al mismo tiempo no son capaces de articular un sistema de participación, sirven para que la gente organice mejor sus propias redes, pero no para participar en la vida pública.
La entrevista completa se puede leer haciendo clic aquí.