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Que bien suele escribir el Flaco, parte II

El Diluvio y la Pasajera

Todo el mundo contento está
los recuerdos cesaron al fin.
Ya sé, los recreos entre el sol
esperan a que el viento sople fuertecon su boca de marfil
y el diluvio caiga contemplándote.

Con el río la luna oye,
los claroscuros esconden perlas
y es así
que desde el cuerpo del volcán
ya muerto,
los indígenas preparan otro rayo láser
para que el diluvio ya jamás los seque.

Y en qué ternura están
aquellos ignorados que se duermen
Y tanto como para no ver
al menos sin ser vista: una reina

Pero ahora bien:
Puede usted mil veces golpear en sueños
que puertas del diluvio no, no hay

Si ya no la esperan a cenar en casa
debe ser porque se marcha
y nunca regresa por la noche
Sin embargo por las mañanas
amanece en su cama
La más leve brisa que recorre el patio
debe ser quién la desnuda
cuando corre loca a dividirse
con su boca tocando el suelo

El suelo de azahar

Invisible, 1974

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